«Las distracciones deben ser conquistadas o nos conquistarán a nosotros; cultivemos, pues, la sencillez.»
-A.W. Tozer
Sembrar la Palabra, cultivar discípulos y cosechar nuevas iglesias, es sólo una manera de resumir un proceso más amplio que presentaré a continuación. Pero antes, permíteme aclarar un par de cosas:
«Queda claro que no es mi intención ganarme el favor de la gente, sino el de Dios. Si mi objetivo fuera agradar a la gente, no sería un siervo de Cristo».
Es muy probable que al leer el título de esta entrada, te hubieras preguntado: «¿Acaso no se habrá equivocado? ¿No habrá querido decir ‘plantar iglesias’ en lugar de ‘cosechar iglesias’?». Pero no, esta no es una equivocación. Cosechar iglesias es, al final de cuentas, el resultado natural de un proceso previo. Un proceso completamente bíblico que, si el Señor lo permite, explicaré en esta serie de publicaciones.